Se acerca la navidad con todo lo que ello conlleva, comidas y cenas copiosas, pocas horas de sueño y excesos. Todo esto provoca que suframos de digestiones lentas y pesadas, ardores, hinchazón, mayor estrés, cansancio, empeoramiento del sistema inmunológico y por lo tanto la posibilidad de caer enfermos con mayor facilidad.
Para evitar esta situación debemos preparar el cuerpo unas semanas antes con comidas ligeras como pueden ser caldos, pescados al vapor, verduras, yogures e infusiones.
Recomendamos para los días clave:
- No saltarse nunca ninguna comida, ya que si lo haces llegarás a la siguiente con demasiada hambre y comerás más de lo debido.
- Elige un número limitado de platos y no hagas las comidas estilo buffet ya que cuanta mayor variedad de platos mayor será la ingesta. Intenta que las guarniciones sean lo más sanas posibles como puede ser verduras al vapor con alguna especia para darle sabor.
- Sírvete la ración que vayas a comer en tu plato en lugar de picotear y evita repetir. Una buena forma de hacerlo es llevar los platos ya servidos a la mesa.
- Come despacio. Al hacerlo la sensación de saciedad es mayor e ingerirás menos cantidad.
- Es muy importante mantenerse hidratado. Estas comidas suelen estar más sazonadas de lo habitual. Bebe al menos 2 litros de agua al día. ¡Ojo con los mayores de la casa! Tienden a beber menos cantidad de líquido, por lo que recomendamos hacerles sopas, consomés, cremas…
- Ingiere bastante fibra. Estos días solemos hacer excesos y por ello tenemos dificultad para ir al cuarto de baño. La fibra la encontrarás en alimentos como el pan integral, verduras y frutas.
- El alcohol hay que tomarlo con control. Además de si bebes no conduzcas estas navidades, debes saber que el alcohol tiene la misma cantidad de calorías que la comida y a pesar de las creencias nos hace conciliar el sueño peor.
- No renuncies al turrón, pero procura que sea con mayor cantidad de frutos secos, de esta manera nos endulzaremos pero comiendo productos más naturales.
No hay alimentos buenos o malos, podemos comer de todo siempre y cuando lo hagamos con moderación, excepto aquellas personas que tengan una dieta especial por alguna enfermedad que recomendamos vayan a su médico de cabecera para ver los cambios que pueden realizar en sus dietas sin llegar a producir descompensaciones.
Si hacemos correctamente las comidas, lograremos conciliar el sueño de manera más fácil.
Además deberemos procurar:
- Mantener un horario, no trasnochar demasiado y si lo hacemos intentar levantarnos a la misma hora para que el cuerpo no se desequilibre.
- Practicar ejercicio ya que libera tensiones y ayuda a conciliar el sueño, salir a dar un paseo tras las comidas o cenas es una buena forma de hacer una buena digestión y llegar a la cama con ganas de descansar.
- La cama es sólo para dormir, evita tumbarte a leer, ver la televisión o las redes sociales ya que dificultará a la hora de tumbarte y conciliar el sueño.
- Las siestas pueden ser beneficiosas para reponer energía para el resto del día, pero sólo si son de corta duración (20 min aproximadamente).
Ya sabes, si quieres pasar unas buenas navidades evitando esas pequeñas molestias y además sin tener que ponerte con las tan odiadas dietas en Enero, sigue los pasos recomendados, que unido a los consejos de nuestro artículo anterior “Claves para mantenerse en forma” será la manera perfecta de entrar en el Año Nuevo más joven que nunca.
DESIRÉE MÉNDEZ MUÑOZ
TRABAJADORA SOCIAL